En la tarde de hoy hemos vivido unos de los momentos más emotivos para nuestra Comunidad Educativo Pastoral. Un nutrido grupo de jóvenes comenzaron una emocionante etapa de sus vidas hace dos cursos para llegar a una meta que sabe a triunfo y superación. Objetivos cumplidos, ambiente de familia, felicidad y emoción estuvieron presente en esta tarde tanto en el Santuario María Auxiliadora como en el teatro del Colegio.
La tarde comenzó con una celebración de la palabra para dar gracias a Dios por los dones recibidos a lo largo de estos dos cursos donde se han podido compartir momentos pastorales muy positivos como convivencias, excursiones y días festivos como los de María Auxiliadora y Don Bosco. Momentos para compartir y crecer en amistad. El director, Don Mario Pardos, aprovechó para dirigir unas palabras a estos alumnos llenas de sabiduría a partir de la lectura del Evangelio invitándoles a asentar su vida sobre roca, sobre pilares firmes que siempre sustentarán la casa ante la adversidad. Una vez acabado este momento los familiares esperaban emocionados en el teatro donde se realizó la imposición de becas y entrega de diplomas y orlas. Allí llego el turno de las intervenciones de los alumnos de cada uno de los ciclos. Llenas de anécdotas, agradecimiento y sueños de futuro. Finalmente todo acabó con las palabras del Jefe de Estudios de FP, Alfonso Bermúdez y Fernando Mariscal como Director de Centro.
En palabras de Pablo Gómez, Coordinador de estos Ciclos Formativos de grado básico, resalta que estos chavales parten de un punto de partida complejo, con situaciones personales que necesitan el respaldo del profesorado, por lo que verlos conseguir su objetivo es muy motivador. En este proceso de dos cursos se ve desde primera mano el trabajo en relación al mundo profesional. Lo que aporta el valor del trabajo para ellos.
Por su parte, Juanma Falantes, orientador de FP, apunta que hoy celebramos que el alumnado que se ha perdido en el camino de la ESO es capaz de reencontrarse, reinventarse y encauzar un camino hacia su mejor versión. Vivimos todos este momento acompañados por el más sincero orgullo y el agradecimiento de las familias que disfrutan de la graduación de sus hijos. Es emotivo igualmente observar la satisfacción del equipo docente que les ha acompañado en esta etapa.
Por su parte, desde su visión como jefe de estudios de FP, Alfonso Bermúdez vive el momento valorando el éxito del acompañamiento, de las segundas oportunidades y de la atención a la diversidad. Se puede llegar a una misma meta por diferente camino atendiendo a las sensibilidades, intereses o necesidades del tipo de alumnado. La sensación es que el profesorado pone el corazón y valora al alumnado en su totalidad y no por cada asignatura en concreto. Concluye destacando que para ser profesores de la formación profesional básica se debe contar con un perfil docente muy determinado y sensible a las necesidades de un alumnado muy concreto.
¡Felicidades a todos por vuestro esfuerzo y gracias a las familias por contar con nosotros para la formación de sus hijos!